Experiencias mágicas.

Hace poco volví a desaparecer como de costumbre por unos de mis viajes. Esta vez después de tres años volví a vivir la increíble y multitudinaria experiencia del encuentro en Benagalbón, que dura como una semana. Realmente nunca dejará de soprenderme. Hace tres años años que no vivía esa experiencia de nuevo y casi había olvidado lo grande que era. Es increíble como en pocos días puedes conocer a tanta gente que puede significar tanto, que sabes que nunca olvidarás. De allí salen grandes amistades y preciosas historias de amor. Cientos de personas nos reunimos allí para vivir una semana diferente, distinta, lejos de nuestra casa y disfrutar del verano. Allí nos separan en los típicos grupos, grupos que te acompañarán durante toda la semana y que estarán contigo para cada comida y cada dinámica que se haga. El de este año fue increíble, no había rato en que no nos estuviésemos riendo. Durante aquella semana olvidé todo de puertas para afuera, era como estar en el cielo, felicidad constante. Conocí a grandes amigos que espero que formen parte de mi vida, chicas preciosas y buenas y gente que merece la pena. Incluso creo que me he vuelto a enamorar (como forma de hablar claro), pero de eso hablaré en otra entrada. Aquello es mágico, siempre lo diré. El pais de nunca jamás. No importa que edad tengas o cuanto tiempo pase, allí siempre serás Peter Pan. Reencuentros y nueva gente. Es facil ser feliz allí, es como tocar el cielo. Nunca volveré a olvidar todo aquello. Nunca sabes que te deparará allí, con tu gran familia. Volveré, lo prometo.